Recogiendo sus últimas cositas en lo que era su taller encontramos a Jhon Arango, que con mucha emoción nos permitió grabar y saber algo de su historia, así no pudiéramos verlo ejerciendo su oficio.

En 1988 en Pérez Tobón Hermanos aprendió a manejar sistemas de volteo hidráulicos, cuando en Medellín el único que sabía de eso era “Jaime Gato”.
Luego pasó por varios talleres hasta que en una día le dieron la herramienta y montó su propio taller, el que duró casi dos décadas en el barrio Naranjal.

Hasta que la EDU mostrando acabado un barrio que no estaba acabado, influyó que el trabajo disminuyera, incluso haciendo vender el torno y las herramientas a Hugo (su compañero), que hoy en día está todo confundido porque ya viejo no quiere cambiar de vida.

Pero lo intentaron todo para salir mejor de Naranjal: formar una agremiación del servicio vehículos Naranjal, unirse a Cornaranjal, y en últimas, ninguna dio resultado, y con el dolor en el alma, le dice adiós a su segundo hogar, y se va para Bello, a comenzar de nuevo, a intentar mejorar y aprovechar este golpe para salir mas fuerte.