Hace más de una década en Argentina, un pueblo que aún se recuperaba de los estragos de la dictadura, le cayó otra época oscura: la depresión económica por la globalización del país hecha por ineptos . Y las comunidades e individuos, a pesar de todo, lograron encender las alarmas y se unieron y resistieron y defendieron lo suyo.

Existe un documental precioso, que es capaz con poesía contar la dignidad de los que nada tienen sino lo que son.

“La dignidad de los nadies”

En Argentina, durante los años noventa se reiteró la idea de que la realidad no podía ser caminada, que los ciudadanos debían resignarse a la vía única neoliberal. En este documental se describen las historias y testimonios conmovedores de la resistencia social en Argentina frente al desempleo y el hambre producidos por el modelo globalizador. Son relatos de solidaridad, pequeñas epopeyas contadas por sus protagonistas, héroes anónimos con propuestas colectivas que vencieron el desamparo, reconstruyendo la esperanza.

Dirección y guión: Fernando E. Solanas.
Países: Argentina, Brasil y Suiza.
Año: 2005.
Duración: 120 min.

La dignidad de los nadies tiene muchos momento poderosos. Pero pensando en El Naranjal, nos conmueve totalmente la parte donde los ciudadanos defendieron sus empresas y parcelas con el corazón, la voz y la vida misma. Aquí está el pedacito de sus resistencias (por si no quieren ver todo el documental):

“saben lo que quiere, pero no saben cómo lograrlo…”…

Las leyes pueden decir lo que quiera, pero ellas aplican en nosotros, el pueblo, y si el pueblo se rehúsa en acatarlas, deben ser borradas de nuestros libros de leyes. ¿No?